Ecuador vivió unas elecciones presidenciales anticipadas el domingo en medio de una crisis de seguridad sin precedentes. Alrededor de 13,5 millones de votantes acudieron a las urnas para elegir al sucesor de Guillermo Lasso en unos comicios marcados por la inseguridad en el país andino.
En esta contienda, se presentaron dos candidatos destacados: Luisa González, impulsada por el exmandatario Rafael Correa, y el joven empresario Daniel Noboa, hijo del cinco veces aspirante Álvaro Noboa.
Con el 94% de las papeletas escrutadas, Daniel Noboa encabeza el conteo con una ventaja de más de cuatro puntos sobre su contrincante, obteniendo el 52.29% de los votos, en comparación con el 47.71% de González. Esto hace que el líder empresarial de 35 años sea el próximo presidente de Ecuador, con el respaldo de más de 4 millones 855 mil 586 sufragios.
Esta elección marca un hito en la historia de Ecuador, ya que Daniel Noboa se convierte en el presidente electo más joven del país. A su vez, este resultado le negó a Luisa González la oportunidad de ser la primera mujer en ganar unas elecciones presidenciales en Ecuador.
La jornada electoral contó con una participación del 82.33% de los más de 13.4 millones de ecuatorianos convocados a las urnas, desarrollándose sin incidentes graves. Tanto el Consejo Nacional Electoral (CNE) como la misión de observación electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA) destacaron la normalidad y el orden que prevalecieron durante el proceso.
Daniel Noboa, un líder empresarial heredero de una influyente dinastía exportadora de frutas, asumirá la presidencia de Ecuador, prometiendo restaurar el orden en una nación afectada por la violencia y la inseguridad.